ENSAYO DE UNA CRÓNICA
Son las 10:24 hay un sol radiante, los pájaros realizan su vuelo mañanero en busca de alimento, las hojas de los árboles lucen quietos, pues la ausencia de viento los ha inmovilizado.
Yo estoy escribiendo, a la vez trato de subir un deber al correo para enviarla, pero gracias a la calidad del internet y mi situación geográfica esta tarea se vuelve lenta y tediosa.
Mis manos ágiles a la hora de ensamblar oraciones, paran solo para repetirlas en silencio en su cabeza. Luego continuo escribiendo.
Mi mente no solo está construyendo un texto, mi mente tiene millón cosas en su cabeza. Creo que a muchos nos pasa, el tener mucho que hacer, pero dedicarse de una en una hasta acabar. La satisfacción más grande es haber terminado algo que comenzaste con mucho empeño.
Son las 10:31 algo más de cinco minutos, el silencio del exterior ayuda. El campo tiene eso, la magia del silencio, el pequeño sonido de uno que otro carro, pero la mayor parte del tiempo es callado. Eso es ventajoso cuando tienes que estudiar, preparar una tarea o una crónica.
Ahora las 11:39 y estoy reeditando este texto como parte de un ensayo para crónica, creo que jamás dejaremos de aprender, jamas dejamos de enterarnos de nuevas cosas, de nuevas teorías.
Rodeada de este silencio, invito a todos a leer, nunca es tarde para coger un libro o un artículo científico. Les aconsejo y busquen Bécquer "El monte de las ánimas" de la colección Soria. Es hermosa y espeluznante.
Son las 10:24 hay un sol radiante, los pájaros realizan su vuelo mañanero en busca de alimento, las hojas de los árboles lucen quietos, pues la ausencia de viento los ha inmovilizado.
Yo estoy escribiendo, a la vez trato de subir un deber al correo para enviarla, pero gracias a la calidad del internet y mi situación geográfica esta tarea se vuelve lenta y tediosa.
Mis manos ágiles a la hora de ensamblar oraciones, paran solo para repetirlas en silencio en su cabeza. Luego continuo escribiendo.
Mi mente no solo está construyendo un texto, mi mente tiene millón cosas en su cabeza. Creo que a muchos nos pasa, el tener mucho que hacer, pero dedicarse de una en una hasta acabar. La satisfacción más grande es haber terminado algo que comenzaste con mucho empeño.
Son las 10:31 algo más de cinco minutos, el silencio del exterior ayuda. El campo tiene eso, la magia del silencio, el pequeño sonido de uno que otro carro, pero la mayor parte del tiempo es callado. Eso es ventajoso cuando tienes que estudiar, preparar una tarea o una crónica.
Ahora las 11:39 y estoy reeditando este texto como parte de un ensayo para crónica, creo que jamás dejaremos de aprender, jamas dejamos de enterarnos de nuevas cosas, de nuevas teorías.
Rodeada de este silencio, invito a todos a leer, nunca es tarde para coger un libro o un artículo científico. Les aconsejo y busquen Bécquer "El monte de las ánimas" de la colección Soria. Es hermosa y espeluznante.
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